Fabricación de techos de vehículos a partir de materiales reciclados procedentes de posconsumo.
Reto
Introducir en una pieza del interior del automóvil materiales provenientes de residuos plásticos posconsumo y de neumáticos usadas manteniendo unas excelentes propiedades en términos de calidad, coste y durabilidad
Descripción proyecto
Grupo Antolín ha desarrollado un revolucionario techo sostenible para el interior del vehículo que ha sido concebido desde un innovador ecodiseño que abarca todas las fases del producto con el objetivo de reducir al máximo su impacto en el medioambiente.
Este proyecto, aplicado en el Volvo C40 Recharge, un SUV totalmente eléctrico, logra reducir los residuos y el consumo energético durante la fabricación del producto y satisfacer la demanda de interiores ecológicos para los vehículos, algo cada vez más valorado por el consumidor en su decisión de compra.
En primer lugar, el techo se ha fabricado a partir de residuos plásticos posconsumo y neumáticos usados, manteniendo unas excelentes propiedades en términos de calidad, coste y durabilidad. Fruto de la alianza con un proveedor de materia prima, se trata del primer techo del mercado fabricado mediante un proceso de conformado en caliente de diferentes materiales (poliuretano, tejidos y plásticos reforzados) obtenidos a partir de residuos urbanos, residuos plásticos post-consumo y neumáticos al final de su vida útil. El 100% del tejido, el 70% de la espuma estructural y el 70% del marco de refuerzo del techo solar se han obtenido de residuos que, de no reciclarse, habrían acabado en vertederos o hábitats naturales.
Además, combina dos procesos sinérgicos y complementarios de reciclaje: el reciclado mecánico de plásticos y el reciclado químico de materiales termoestables que no se pueden reciclar por otros medios y que hubieran acabado acumulado en vertederos. El proceso de reciclado químico abre un mundo de posibilidades para mantener todas las propiedades del material virgen y permite dar una oportunidad a los residuos de materiales complejos (termoestables o mezclas de residuos que no se pueden separar) al obtener un aceite de pirólisis que entra de nuevo en el ciclo de producción.
En paralelo, el producto consigue una significativa reducción de peso ayudando a reducir las emisiones de CO2 del vehículo. El techo desarrollado para el Volvo C40 Recharge emplea una innovadora estructura de sustrato de techo con espuma ligera y rígida, y un nuevo diseño del marco plástico del techo panorámico que aligera en un 60% el peso de esa pieza a la vez que mejora su calidad percibida.
Estrategia aplicada
Datos relevantes
Un proyecto basado en un ecodiseño que abarca todos los procesos:
Reducción de emisiones de CO2
La solución permite desarrollar vehículos más sostenibles y menos contaminantes reduciendo el peso y las emisiones de CO2. De esta forma, se puede llegar a ahorrar hasta 25.200 toneladas de CO2 emitidas en la vida completa de un modelo (fabricación de 250.000 unidades/año con un ciclo de vida de 7 años y 160.000 km recorridos de media).
Reducción de residuos
La materia prima proviene de residuos no reciclables por otras vías. Por cada techo fabricado y montado en un vehículo se dejan de generar 2Kg de residuos
Mejora en la eficiencia del proceso
La fabricación emplea menos energía, lo que reduce las emisiones de gases de efecto invernadero, el consumo de agua y la generación de residuos. Además, el cambio en el proceso de unión y ajuste del marco al techo permite eliminar pasos adicionales de proceso, mejorar las tolerancias de montaje, así como el acabado general de la pieza. Y el nuevo proceso de unión es completamente sostenible al no involucrar disolventes ni generar emisiones.
Partners: BASF, Texno, Volvo y Grupo Antolin
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